Diseñado como punto focal arquitectónico del Parque de los Juegos Asiáticos de Hangzhou 2023, el Estadio Principal Híbrido de Archi-Tectonics es una estructura de 35.000 metros cuadrados con capacidad para 5.000 espectadores. Con elipses que se entrecruzan y crean conexiones fluidas entre los espacios interiores y exteriores, la propuesta no solo alberga acontecimientos deportivos, sino también salas de conciertos y espacios para eventos destinados a servir a Hangzhou mucho después de que finalicen los Juegos.
Además de su peculiar geometría, el proyecto da prioridad a las prácticas y materiales sostenibles. Esto incluye la utilización de materiales renovables o reciclados, como el latón reutilizado de la fachada exterior y el revestimiento de bambú del interior del estadio. El uso de latón genera un aspecto exterior característico, como de escama de pez, que aporta textura y movimiento a la fachada, al tiempo que se mantiene en línea con los principios de sostenibilidad que sustentan el proyecto.
La geometría asimétrica en forma de disco permite la disposición de los asientos tanto en estadios como en anfiteatros, por lo que el estadio puede convertirse en un escenario de acontecimientos deportivos o de espectáculos. Además, el estadio no se limita a ser un recinto deportivo y de espectáculos. Las áreas secundarias del programa incluyen un centro de salud deportiva, restaurantes y salas VIP.
En comparación con un estadio circular convencional, la naturaleza híbrida del diseño permite incluir rampas y escaleras que facilitan las transiciones entre los distintos espacios y guían con fluidez a los visitantes hasta sus asientos, al tiempo que conectan el interior del estadio con la ciudad.
Una particular proeza de ingeniería es la cubierta Suspendome, que permite espacios sin columnas en el vestíbulo y una cantidad optimizada de luz natural y ventilación. El diseño de la cubierta facilita la luz natural a través de un gran óculo y una banda continua de ventanas practicables. El estadio también incluye elementos sostenibles, como la refrigeración del agua mediante humedales y la incorporación de los principios de diseño de Sponge City para conservar, recoger y depurar las aguas pluviales para su reutilización dentro del estadio. Finalmente, el estadio obtuvo la etiqueta de evaluación de edificios ecológicos de 3 estrellas, el nivel más alto de sostenibilidad en China y equivalente a LEED Platino.
Por último, el proyecto se ejecutó utilizando BIM totalmente integrado y optimizando el proceso en estrecha colaboración con ingenieros estructurales y fabricantes locales. Esta integración eficiente y la optimización del BIM permitieron un ahorro considerable de 1.130 toneladas de acero y aceleraron los plazos de construcción en un 20%, garantizando que el edificio estuviera listo mucho antes del inicio de los Juegos Asiáticos.
