El proyecto Celler Raventós Basagoiti en el Penedés se inspira en la vida rural, donde vivir, comer y trabajar se desarrollan en un mismo espacio, a diferencia de la separación de actividades característica del entorno urbano. El diseño de esta bodega reinterpreta la masia tradicional, un tipo de construcción rural en la que la vida cotidiana y el trabajo se fusionan bajo un mismo techo, evolucionando con el crecimiento económico y familiar a lo largo de generaciones.
Una de las premisas principales es la integración del edificio en el paisaje de forma armónica. El diseño se basa en la volumetría de las masias tradicionales, con un cuerpo central y dos volúmenes laterales que se adaptan a la topografía existente. Parte del edificio está enterrado para reducir su impacto visual y aprovechar las condiciones naturales del terreno. Además, el proyecto incluye un patio central que actúa como eje bioclimático, permitiendo la calefacción pasiva en invierno y la refrigeración natural en verano.
La bodega tiene una superficie aproximada de 1.500 m² distribuidos en tres niveles. En la planta sótano se ubica el área de entrada de la vendimia, los depósitos de vinificación y un espacio central para la fermentación y crianza de los vinos. También se incluye una sacristía, reservada para la fermentación y crianza de las parcelas más destacadas en años especiales. La planta semisótano alberga las áreas públicas, como una sala de catas, una cocina, un laboratorio y habitaciones para investigadores, enólogos y visitantes. Finalmente, la planta baja está destinada a la parte familiar del edificio.
El proyecto incorpora una estrategia energética sostenible, adecuada para un entorno rural alejado de áreas urbanas. Se han implementado diversas estrategias pasivas para reducir la demanda energética, como el estudio del asoleo, un aislamiento térmico reforzado en las fachadas orientadas al norte, ventilación cruzada y protección solar. La inercia térmica del terreno y de los materiales constructivos se aprovecha para mantener el confort térmico en el interior del edificio de forma natural.
Como estrategia activa, se ha optado por un sistema de energía solar fotovoltaica que cubre toda la demanda eléctrica del edificio, logrando una independencia energética total. En la zona de vinificación se han instalado cuarenta placas solares que, además de generar electricidad, protegen el área de la insolación y de la lluvia. Para la generación de agua caliente sanitaria y calefacción, se ha implementado un sistema de aerotermia.
El reciclaje de aguas grises provenientes de baños y duchas, junto con la captación de agua de lluvia, refuerzan la sostenibilidad del proyecto. Las aguas grises se depuran y devuelven al sistema natural como agua limpia, mientras que el agua pluvial se reutiliza para el riego eficiente del huerto, frutales y vegetación autóctona. Estos sistemas de riego permiten preservar la finca incluso en épocas de sequía.
El Celler Raventós Basagoiti combina tradición y sostenibilidad, integrando vivienda y trabajo en un solo espacio. Emplea estrategias bioclimáticas y energéticas para reducir su impacto ambiental y busca ser un modelo replicable en otros contextos rurales, promoviendo un equilibrio entre la innovación y el respeto por el medio ambiente en la cultura mediterránea.
