Al entrar en la sala, el usuario es recibido por una gama de texturas y materiales que le hacen explorar el entorno de una manera sensorial. El proyecto encargado por un bufete de abogados en São Paulo, Brasil, surgió de la necesidad de un espacio para la interacción y el intercambio de conocimientos. El área de vivienda debe ser el punto culminante de esta expansión. Implantamos este espacio en el centro del conjunto, y trabajamos desde él de manera que fuera un punto de luz (deslumbramiento) que irradiara al resto de la habitación.
Para delimitar el salón, desarrollamos una luminaria de madera suspendida con pantalla tensada, creando un plano de luz difusa. Un interesante e intencionado contrapunto surge al mezclar un material de peso como la típica madera brasileña con una tecnología de iluminación súper actual (hi-tech). Creemos que los proyectos deben estar siempre atentos a las nuevas tendencias sin dejar atrás la cultura y la tradición. La repetición de estas lámparas en el ambiente da fuerza e identidad al proyecto.
Un tabique metálico diseñado por nosotros separa las salas de trabajo individuales del entorno de la vivienda sin bloquear la luz natural para el interior de la sala y la luz artificial para el resto. La idea de cubos apilados formando una niebla, proporciona una sensación de división espacial y privacidad pero mantiene las vistas.
Esta malla metálica refuerza la ortogonalidad y el ritmo de los elementos que componen la arquitectura, que se suaviza a través de las esquinas redondeadas de la lámpara y la pared curva que alberga la puerta del auditorio, invitando al usuario a explorar el espacio y simulando poéticamente el hojeado de un libro.
Elegimos explorar la línea horizontal debajo de los rayos para aportar ligereza y amplitud al espacio. Para demostrar este concepto, el panel de madera no llega a la losa, así como el tabique metálico y el bloque del auditorio.
A través de una paleta de colores neutros y silenciosos, buscamos traer un poco de calidez residencial a este ambiente corporativo en el que el principal propósito era conectar a las personas y fortalecer las relaciones humanas. También había una gran preocupación por impresionar la cultura local en ese entorno. Las placas de hormigón expuestas y el uso de madera nativa, combinado con el mobiliario de grandes diseñadores brasileños contribuyen a esto.