El estudio de arquitectura MODU, con sede en Brooklyn, ha terminado recientemente Mini Tower One, un proyecto de ampliación y renovación de la parte trasera de un edificio residencial multifamiliar en Carroll Gardens, Brooklyn. El proyecto, de 325 metros cuadrados, integra de forma innovadora la naturaleza urbana con estrategias de bajo consumo energético, respaldadas por su adhesión a los principios del diseño de casas pasivas. El diseño de casa pasiva es crucial para la construcción sostenible, ya que reduce drásticamente el consumo de energía y la huella de carbono de un edificio. Entre sus componentes clave figuran las fachadas superaisladas y la construcción hermética para mantener temperaturas interiores agradables con un consumo energético mínimo.
Enmarcado por un abedul de 15 metros, el proyecto incorpora estos principios de casa pasiva junto con soluciones como calefacción exterior radiante en la terraza, una cortina de aire que permite que la terraza acristalada se abra al exterior manteniendo el ambiente interior, y un árbol plantado en el interior para filtrar el aire y refrigerar. Estas características permiten a la Mini Tower One pasar de ser una casa hermética y energéticamente eficiente durante los meses de máxima calefacción y refrigeración a una serie de espacios interiores-exteriores durante el tiempo templado.

El edificio está dotado de grandes aberturas que facilitan la ventilación cruzada en todas las plantas. A pesar del aumento del 30% de la superficie de la parcela debido a la adición, la Mini Torre Uno sólo requiere un 12% de energía adicional, una demanda cubierta por paneles solares en la azotea. La terraza de la azotea cuenta con un jardín comestible y ofrece un espacio para la relajación y el entretenimiento.
El sistema estructural de la ampliación utiliza una estructura metálica ligera y losas de hormigón "minivigas". La envolvente está revestida de paneles de aluminio reciclado de Morin, una empresa del Grupo Kingspan, con nervaduras triangulares que confieren al edificio una rica textura visual.
El proyecto forma parte de la investigación en curso de MODU centrada en el aumento de la densidad de viviendas dentro de las estructuras de "vivienda media" existentes en la ciudad de Nueva York. Esta estrategia de desarrollo maximiza el coeficiente de superficie disponible (FAR) sin necesidad de demolición total, lo que hace que estas ampliaciones sean accesibles para los propietarios de larga data. La investigación identifica 1.000 residencias multifamiliares en Nueva York en las que puede aplicarse este modelo, sobre todo en propiedades con una altura de zonificación limitada, estructuras existentes insuficientes o condiciones de suelo inestables.