Pedra Silva Arquitectos presenta Aethos Ericeira, un hotel boutique situado en Ericeira, Portugal, con vistas al Atlántico.

El proyecto era una intervención de rehabilitación de un edificio existente situado en un emplazamiento protegido, y estaba condicionado por numerosas limitaciones. A pesar de las numerosas restricciones, el trabajo de la empresa se esforzó por respetar el emplazamiento y el edificio existentes para preservar parte de su historia.

El edificio original se perdió un poco en varias ampliaciones posteriores, con soluciones arquitectónicas contradictorias y una mezcla confusa entre elementos tradicionales y modernos. Durante el desarrollo de este proyecto, el punto de partida de los arquitectos fue desnudar los edificios hasta su esencia y separar los elementos que querían conservar y los que decidieron dejar marchar.

En esta profunda intervención de remodelación, hubo algunas iteraciones clave de diseño que cambiaron por completo la dirección del proyecto. Una de esas interacciones fue el cambio de la entrada principal, del centro del edificio a la fachada que da al mar, donde la empresa creó una zona de doble altura que conecta con el paisaje marino y recibe a los usuarios con esa experiencia de llegada. Durante el proceso de diseño, comprendieron la importancia de crear algo distinguible, que acentuara el carácter del espacio. Aunque el edificio existente tenía arcos, éstos carecían de expresión significativa y tenían una escala deformada. Los arquitectos les dieron proporción, textura, profundidad y masa para acentuar la presencia de los muros y proteger la sala de la luz solar directa durante los meses más cálidos. Se eliminaron las ventanas, lo que devolvió el sentido de la proporción. El resultado es un espacio con límites arquitectónicos bien definidos, y a la vez delicado, que juega con las sombras y la luz.

Una segunda iteración clave fue la demolición casi completa de un sótano existente en el borde de la zona de la piscina, que contenía una sala multiusos subterránea. Aunque esto supuso una reducción significativa de la superficie construida, permitió una conexión más amplia entre la piscina, que antes estaba rodeada de altos muros por todos lados, y el edificio del hotel, allanando el camino para rediseñar los alrededores de la piscina en una serie de niveles interconectados que invitan a la perfección.

Durante el proceso de diseño, otras iteraciones ayudaron a dar forma al proyecto, como las ventanas más grandes, que respondían a los requisitos del pliego de condiciones y a las condiciones del emplazamiento. Las ventanas más grandes permiten la entrada de luz y aprovechan las vistas, en lugar de optar por las tradicionales aberturas de fachada más pequeñas, especialmente en las zonas sociales. En consonancia con el objetivo de la empresa de distinguir claramente entre lo antiguo y lo nuevo, dotaron a estas ventanas de una identidad visual y una materialidad propias, diseñándolas como cajas metálicas que sobresalen de las fachadas, lo que acabó convirtiéndose en uno de los rasgos definitorios del edificio.

La disposición revisada define una nueva organización de los edificios del paseo marítimo, con un ambiente de planta abierta como pedía el briefing. La entrada principal, a nivel del suelo, con un espacio de doble altura, incluye la zona de estar y la recepción. Junto a este espacio se encuentran las salas polivalentes y de servicios auxiliares, y en el lado opuesto se sitúan el restaurante, la zona de bar y la conexión con un segundo edificio, así como las zonas de servicio. Las salas principales, como la polivalente, la entrada principal y el restaurante, tienen una conexión directa con el exterior, aprovechando su ubicación privilegiada con amplias zonas al aire libre y grandes ventanales nuevos que enmarcan el paisaje marino.

El primer nivel incluye principalmente dormitorios, algunos de los cuales siguen la misma distribución que el edificio existente, aunque con mejoras que cumplen la legislación vigente. Las principales alteraciones se refieren a la creación de la zona de entresuelo, donde uno puede relajarse y disfrutar de las vistas. El sótano de este edificio alberga todos los espacios de servicio, como almacenes, zonas para el personal y cocina con accesos exclusivos para el servicio y las entregas.

El edificio de ampliación, donde se ubican la mayor parte de las habitaciones, mantiene la misma distribución en planta baja y primer nivel, aunque ligeramente modificada para adaptarse a la normativa actual y al nivel de servicio previsto, así como nuevas conexiones con los espacios exteriores. En el borde del edificio de ampliación, ocupando parte de la antigua huella del sótano, se crea un nuevo pequeño edificio para dar cabida a un spa, que también se conecta con la zona de la piscina y el edificio del gimnasio.


Pedra Silva Arquitectos considera importante destacar la profunda intervención llevada a cabo en las zonas exteriores, lo que ha permitido a la firma maximizar el uso de los espacios, así como crear flujos que funcionan no sólo desde el punto de vista del diseño, sino también desde el punto de vista funcional.

En términos de forma, color y materialidad, el reto consistía en lograr un aspecto que se integrase bien tanto con el edificio existente como con el llamativo paisaje. Pedra Silva Arquitectos lo consiguió eliminando algunas cubiertas inclinadas y abriendo los balcones, aplicando lamas verticales de madera y paneles metálicos que cubrían las fachadas, reinterpretándolas así en formas y volúmenes más claros. El color y la textura juegan a favor de este concepto, ayudando a resaltar estos dos tipos de intervenciones: la tradicional, con paredes de color claro emparejadas con fenestraciones de marcos más oscuros, y la moderna, con la textura y calidez de la madera combinada con los marcos más oscuros. El uso de estos materiales contrastados pero complementarios desempeñó un papel importante en el desarrollo del concepto y la integración del paisaje y los interiores.



Team:
Architects: Pedra Silva Arquitectos
Client: Aethos Hotels
Interior design and FF&E: Astet Studio
Landscape architecture: Topiaris
Main contractor: Novos Construtores
Selected consultants: Natural Works
Photography: Francisco Nogueira - Architectural Photography


Materials used:
Lightning: Prolicht
Exterior cladding: Weber
Timber slats: Carmo
Window frames: Technal
Timber flooring: Oscar Ono
Joinery: Epoca


