FVI es la transformación de un local en desuso del Madrid histórico en un espacio para albergar distintas actividades.
El proyecto trata por tanto de generar un espacio suficientemente flexible, como para poder ser programado de muy distintas maneras; suficientemente neutro, como para poder ser apropiado por diferentes ocupantes y suficientemente diferencial, como para tener identidad propia.
La estrategia divide la intervención en dos: fondo y figura.
El fondo asume el rol de convertirse en ese espacio genérico, neutro, a modo de caja blanca, que pueda ser apropiado por cualquier actividad. Para ello se trata el espacio contenedor, de manera que quede expuesta su materialidad en crudo, quitando los revestimientos acumulados a lo largo de los años. Posteriormente se unifica el espacio mediante a una capa de pintura blanca aplicada sobre los distintos materiales y texturas existentes. Por otra parte se plantea un sistema de cortinas, a modo de fondo expandido, que permite activar o desactivar determinadas áreas y facilitar el uso del espacio con diferentes actividades simultáneas.
La figura se crea a partir de una estructura de apoyo, que por una parte de servicio al espacio y por otra tenga capacidad de convertirse en la propia imagen que represente el proyecto. Esta estructura toma forma de pórtico biapoyado de acero inoxidable, que alberga tanto las instalaciones comunitarias preexistentes, que cruzaban verticalmente el espacio, como las instalaciones propias de climatización, electricidad y fontanería. Este elemento servidor está concebido como un puzle, que puede descomponerse en diferentes piezas, funcionando como soporte para la exposición de cualquier tipo de objeto o producto, dependiendo de la actividad desarrollada en el espacio.
En la planta inferior, se introduce un elemento portante, una cercha Warren, necesaria para reforzar estructuralmente el forjado de la planta baja. Con el fin de marcar claramente esta intervención de apeo, se pinta este elemento de amarillo, para diferenciarse de la envolvente existente. FVI es por tanto una suma de elementos que tratan de consolidar por una parte un edificio preexistente de principios del SXX y por otra un sistema que trata de facilitar la actividad de sus usuarios.
