Sculptor’s Apartment

Radek Úlehla

Apartamento del escultor

• Arquitectos

Vladimír Bachorík, escultor y vidriero, siempre ha trabajado en su apartamento de una urbanización de Praga; por eso quiso diseñar un espacio de trabajo en vidrio como parte de una reconstrucción total. Lo que no quería era una puerta. Un encargo inusual tiene el valioso potencial de generar soluciones insólitas, que decidimos utilizar como experimento: ¿cuáles son las máximas posibilidades de un piso prefabricado clásico? ¿Hasta dónde podemos llegar?

photo_credit Radek Úlehla — Radek Úlehla

Nuestro objetivo era utilizar una tipología híbrida y lograr el máximo grado de libertad, luz y generosidad. Los límites y las funciones se desdibujan en términos de planta y material: el espacio, abierto y fluido al máximo y sin puertas, sólo está dividido por medias secciones arqueadas de vidrio perfilado en U. Estos bloques de vidrio translúcido de alta calidad garantizan la penetración de la luz. Estos bloques de vidrio translúcido de alta calidad garantizan la penetración de la luz. Su materialidad y carácter remiten naturalmente a la obra de toda la vida del cliente.

Además de la estática, la infraestructura es una limitación clave del diseño. El punto neurálgico se convierte así en la conexión de agua y alcantarillado, que define la ubicación del espacio casi cerrado. El elemento más destacado es, por tanto, el arco del baño con inodoro y ducha. Debido a la gestión de los residuos, está encaramado a una pequeña plataforma que acentúa sutilmente su dominio espacial. La composición en planta se complementa con tres curvas abiertas de cristal perfilado en U que definen discretamente el guardarropa, el almacén y el espacio de trabajo, es decir, la cocina. El espacio restante se modula libremente entre estas líneas de cristal y queda abierto a cualquier interpretación futura. Trabajamos con nuestro principio favorito, según el cual un espacio uniforme y sin ambigüedades constituye el telón de fondo de la vida (en este caso, sobre todo del trabajo) de su habitante. También trabajamos con nuestro segundo principio favorito, según el cual eliminamos todo lo que no es portante y no infringe la ley.

La planta rectangular "de ventana a ventana" está atravesada por un muro de carga de hormigón armado con dos aberturas, que (gracias a su posición privilegiada) fue el único elemento al que despojamos de su esencia material y lo convertimos en portador de la identidad del lugar. El resto de los muros y el techo, en cambio, se han dejado en un enlucido blanco liso: no nos interesa exagerar el manierismo del hormigón, ni competir demasiado con el elegante cristal, ni crear un espacio demasiado cerrado. Los lugares donde el agua entra en contacto se definen con mosaico blanco sucio. La generosa cocina, donde se crean más objetos que comidas, está diseñada específicamente para adaptarse funcionalmente a su propósito principal. El carácter de cada espacio se acentúa por el tipo de luminarias utilizadas: líneas estrictas o focos sueltos.