Recientemente se ha inaugurado el edificio residencial Jonas, en el barrio IJburg de Ámsterdam. El complejo, situado en el puerto del barrio, cuenta con 273 viviendas, 190 de ellas de alquiler a precio medio y 83 ocupadas por el propietario. Architectenweb visitó el edificio por invitación del promotor Amvest, Orange Architects, Felixx Landscape Architects & Planners, Ballast Nedam West y ABT.
Jonas es un gran edificio situado en un lugar prominente, pero no llama inmediatamente la atención como el Sluishuis. El alargado complejo del puerto de IJburg tiene un inconfundible carácter marítimo, sin ser inmediatamente reconocible como un barco (o una ballena; el nombre del edificio procede de la historia de Jonás y la ballena). En la fachada se han destacado algunos "especiales", en forma de varios ventanales con marco de madera tras los que se sitúan, entre otras cosas, un hogar especial y una sala de yoga.
Pero decir que Jonas llama la atención, no. La distinción con los demás edificios de la zona es engañosamente sutil. El complejo tiene una forma más juguetona que los bloques rectos que caracterizan el barrio y la fachada es de zinc, en lugar de ladrillo. Además, el edificio constituye sobre todo un telón de fondo natural y tranquilo para los veleros amarrados en el puerto. Por supuesto, se puede considerar una cualidad, sobre todo para un complejo que alberga un amplio programa (30.000 metros cuadrados). Aun así, hay que entrar para apreciar realmente el edificio. Afortunadamente, eso es posible, en parte, gracias a la primera planta de acceso público.
Combinación de uso público y programa residencial urbano
Jonas está construido en una península donde hasta hace pocos años había un campo que utilizaban principalmente los niños para jugar, por ejemplo, al fútbol. Para su diseño, los arquitectos quisieron preservar el carácter público y el uso lúdico del solar y combinarlo con un programa residencial urbano contemporáneo, en el que, además de viviendas, se realizan instalaciones colectivas como un cine, una "playa en la azotea" y una sala de estar para todo el vecindario. El plan también prevé una explanada con funciones públicas como un graderío, una playa y una isla para jugar. Además de permitir que los residentes (del barrio) se entretengan y recreen allí, está previsto que se celebren proyecciones públicas de películas, barbacoas y otros actos.
El carácter público se extiende por toda la primera planta del edificio. El patio delantero, aún por construir, linda con la sala de estar colectiva situada en la cabecera del edificio, donde residentes y visitantes pueden relajarse y organizar actividades. Este espacio en forma de cueva, en el que también se podría reconocer la boca de una ballena, es el vestíbulo de la parte más espectacular del proyecto: el "cañón". Con sus paredes facetadas de listones de madera, sus techos y su mostrador de recepción, la sala es una experiencia en sí misma. Pero el cañón posterior, el espacio central de acceso al edificio, es aún más impresionante.
Cañón
En realidad, el cañón está diseñado como un cañón de montaña, una imagen evocada por una interacción de listones de madera curvados y discos de hormigón biselados de forma diferente. Los listones, que varían en longitud, están unidos entre sí mediante chavetas. "Lo llamamos bisagras de Pinocho, por el ejemplo de las marionetas que también se ensamblan con chavetas", dice Jeroen Schipper, de Orange Architects. Desde la segunda planta, a la que sólo pueden acceder los residentes, se sube al tejado por un camino de montaña; un camino inclinado que se desplaza hacia arriba con la pared.
El cañón no es sólo un truco visual, destinado a animar una galería residencial por lo demás corriente. La fachada de las viviendas también serpentea con él, y las dimensiones de la nave varían, dando a las viviendas diferentes anchuras y profundidades. Además, algunas viviendas tienen más plantas, para poder ofrecer la necesaria diversidad de tipos de vivienda. La paleta abarca desde estudios compactos (la gran mayoría de la oferta, el setenta por ciento de las viviendas pertenecen al segmento "asequible" y tienen entre 43 y 52 m²), dúplex y villas urbanas.
Patio
La secuencia de espacios de acceso público de la primera planta termina con un patio arbolado rodeado de fachadas de madera (como contraste con la fachada exterior de zinc "más duro" del edificio). En la esquina del volumen hay una abertura con una escalera que desciende hasta el agua. Aún se está construyendo un puente entre Jonas y el hotel adyacente. Cuando esté terminado, los peatones podrán hacer un recorrido completo del puerto de IJburg, tanto a lo largo como a través del edificio.
Un edificio residencial contemporáneo no está acabado sin que se realice algo especial en la azotea. Los residentes de Jonas y sus invitados tienen acceso a una auténtica "playa en la azotea", con bar de piscina incluido. En medio de las viviendas de la planta de la azotea hay un paisaje recreativo en torno a una corriente de agua que atraviesa la claraboya del cañón que hay debajo. Para realzar la sensación vacacional, parte del pavimento está formado por piedras de granito portugués. Uno se pregunta si los residentes de las viviendas de alrededor acabarán contentos con la función recreativa (aunque la playa de la azotea no sea de acceso público) frente a sus casas, pero el tiempo lo dirá.
Todos los principios cumplidos en la licitación
Amvest y sus consorcios ganaron la licitación de la ciudad de Ámsterdam para Jonas en 2017, principalmente por criterios como la calidad y la sostenibilidad. Durante el proceso de construcción, el contratista Sprangers quebró y las partes tuvieron que hacer frente a un aumento de los costes de construcción y a retrasos en las entregas, entre otras cosas. No obstante, se cumplieron todos los principios con los que la asociación ganó el concurso, afirma Schipper. "Por supuesto, hubo discusiones sobre si debíamos ajustar ciertas cosas, pero nos pareció importante cumplir las promesas que hicimos en la licitación. Además, en esta licitación la oferta de terrenos sólo pesaba un diez por ciento y presentamos la oferta más baja de todas las partes." Además, no es baladí que la promotora Amvest sea también propietaria del edificio y, por tanto, responsable de su explotación. Además de Jonas, Amvest también es propietaria de los edificios IJland y De Havenmeester, en el puerto de IJburg.
