En Cascais (Portugal), el estudio lisboeta Miguel Marcelino Arquitecto transforma la humilde casa rural de Casal Salolio, en Outeiro de Polima, una de las más antiguas en pie de la zona, en un moderno espacio museístico.
La antigua casa sufrió una serie de transformaciones y ampliaciones sucesivas que dieron lugar a una compleja capa de arquitectura e historia. Los arquitectos reconocieron la importancia de la historia y la evolución del edificio a lo largo del tiempo y decidieron restablecer el carácter rural de la casa junto con sus capas arquitectónicas en su última forma reconocible, introduciendo al mismo tiempo intervenciones contemporáneas.
Originalmente, la estructura constaba de un solo compartimento al que posteriormente se añadieron una sala anexa y un ala lateral. Posteriormente, se incorporaron al edificio un horno de piedra, un corral, un segundo piso y anexos adicionales. Además, se adosaron dos contrafuertes para contener los problemas estructurales.
Los exteriores mostraban una geometría fragmentada e irregular, lo que permitió a los arquitectos hacerse una idea clara de su evolución a lo largo de los años. Dos nuevos volúmenes que siguen la escala y el estilo existentes se cruzan en forma de L y forman un patio, continuando el carácter del edificio original de forma contemporánea.
La nueva construcción, una bella interpretación de la arquitectura rural, se integra perfectamente en el paisaje circundante. En conclusión, la transformación del Casal Saloio de Outeiro de Polima en un moderno espacio museístico es un testimonio de cómo el diseño puede rendir homenaje al pasado y mantener la continuidad con el lugar, integrando al mismo tiempo elementos contemporáneos.