La fábrica de costura Amairis es una idea liderada por las madres del pueblo de San Isidro, junto con el centro comunitario local que promueve estrategias educativas y culturales en Puerto Caldas, Pereira, Colombia.

Nos unimos a este equipo de agentes interdisciplinarios reunidos por un grupo de personas empoderadas que abrieron posibilidades creativas para acceder a las redes simbólicas locales que se entrelazan en su vida cotidiana. Esta relación de confianza y los hallazgos observados en el paisaje fueron premisas fundamentales para diseñar y construir un espacio de trabajo para ellos.

La idea surgió de las condiciones geográficas particulares en las que el río corre a lo largo del valle adornado por los cultivos de maíz y un cielo azul profundo que se desvanece en el horizonte. Abundantes cantidades de bambú (Angustifolia Kunth) y una aldea vecina con artesanía tradicional de tejas de cerámica y ladrillos, fundidos como elementos simbólicos y constructivos relevantes. Las técnicas de construcción populares colombianas se elevan en el paisaje, donde la materia y el espacio son moldeados por los "autoconstructores" para crear un hábitat propio.

La ubicación de la fábrica de costura traza el tránsito solar que afecta a la fachada principal, concebida como un dispositivo dinámico que proporciona varios grados de apertura; mientras que la fachada posterior está formada por un muro, para almacenamiento, y veinticuatro ventanas que crean un ritmo que enmarca el camino. La intimidad se ve alterada por el vidrio de la fachada lateral sur, realizado en su totalidad para generar varias líneas que transforman la extensión de la plataforma.