El nuevo hospital de QuirónSalud en Córdoba compacta su programa y lo ordena en dos grandes volúmenes maclados. Por un lado el bloque técnico y la hospitalización, de mayor tamaño tanto en planta como en altura y por el otro el programa ambulatorio, más contenido a nivel de escala.
Estos dos cubos se disponen según dos alineaciones distintas, el principal sigue la trama actual de la ciudad, mientras el ambulatorio se gira según la huella histórica para salvar los restos arqueológicos de la época islámica.
La sencillez volumétrica se reviste con una compleja doble piel. Una celosía de piezas triangulares perforadas tamiza en primer término la luz del sol. Por detrás la segunda envolvente cierra el edificio. La combinación de ambas capas consigue una fachada energéticamente muy eficiente con una imagen dinámica y vibrante.
Los accesos se producen en el punto de unión entre los dos cuerpos, por un lado la entrada principal y por el otro la de urgencias. La celosía exterior se despliega amparando ambos accesos con una pérgola - marquesina.
La distribución interior de ambos módulos se estructura en torno a sendos patios claustrales. El proyecto resuelve el complejo plan funcional de un hospital de 100 camas con claridad y nitidez.