La propuesta premiada en el Concurso, para la parcela R-1 del Plan Especial de la Estación de Burgos se basa en que existen líneas de acción emergentes que definen hoy, con nuevas energías, el actual proyecto residencial. Entendemos el espacio habitado como un potencial interface, un cruce de fuerzas entre lo global y lo particular, lo íntimo y lo colectivo. El material básico de la ciudad, el tema de la vivienda, que se enfrenta a un esclerótico anquilosamiento de sus fórmulas, obligadas por el tributo que rinden a modelos de edificios y urbanismo confiados en una ciudad impuesta sobre el territorio. Las claves que inciden hoy en el proyecto residencial son: Su nueva definición programática en sintonía con unos usos y unas formas de vida en acelerado cambio. Su nueva difinición espacial y técnica. Su nueva inserción proyectual en el espacio contemporaneo. Debemos tener en cuenta que la vivienda se manifiesta como el producto por antonomasia y resulta ser un bien de mercado instalado en la sociedad de consumo, por ello la vivienda sigue constituyendo un campo particularmente proclive al convencionalismo, a la repetición que lleva el lastre del pasado. Se basa la principal fuente de inspiración en modelos urbanos fundados en la tradición. Modelos construídos entorno a la idea básica de continuidad y repetición ( tipología constructiva, de imagen, de uso,…) Nos apoyamos en tres viejos mitos: Confianza en un referente histórico de ciudad, en el que la vivienda era el principal generador de tejido ( la calle como acontecimiento central ) Confianza en la coherencia entre tipo y construcción ( la técnica como tradición procesal) Interes por lo tipológico “hábito común” ( la vivienda como arquetipo) Los nuevos modos de vida, donde hay una transformación de la unidad familiar, predominio de padres sin hijos o con pocos hijos, y donde está el indivíduo por encima de los clanes familiares. Sustitución de la ídea de convivencia por la cohabitación, donde se sustituye el espacio privado por un espacio de servicios en un nivel urbano (bares, restaurantes, cines, clubs deportivos,….) La ciudad se convierte en una gran casa dispersa para un usuario nómada. La actual inestabilidad laboral favorece la movilidad residencial y con ello un incremento de la vivienda de alquiler. La progresiva coparticipación de los miembros activos en la economía familiar, la necesidad de reducir las tareas domésticas, es por lo que aparece una nueva concepción de los espacios servidores ( cocina y baño) llamados a convertirse en áreas lúdicas baño-gimnasio o cocina-laboratorio, con un progresivo componente tecnológico. Entendemos la vivienda como un lugar mas proximo a la calidad de vida y a la fantasía del ocio y el bienestar, que a la austeridad de un espacio como mera necesidad social; una nueva vivienda planteada desde la diversidad, la individualidad, más que desde la homogeneidad y la colectividad. Todo ello requiere un nuevo concepto del diseño del espacio habitado ( la vivienda y su paisaje interior) pero tambien en la definición de los espacios urbanos de soporte, donde existe la relación entre vivienda y ciudad, relación entre paisaje interior y exterior. Por lo que nuestro programa propuesto es el aprovechamiento de la superficie y volumen en uso de alojamiento, en todas las plantas, destinando parte de la planta baja a locales comerciales, y la planta bajo rasante para garaje. Los accesos a los edificios se realizarán desde la parcela privativa de uso común. El paisaje exterior es el espacio urbano de soporte, donde se produce la relación de la vivienda con la ciudad. Se pretende crear un espacio único, donde el individuo contraste el espacio privado con el barrio. El espacio privado interior se estructura combinando franjas de diferentes usos, siguiendo un eje este-oeste, predominando el espacio ajardinado. En su extremo oeste se crean locales comerciales, fomentando las relaciones norte-sur de los nuevos tejidos con los barrios antiguos. La presencia de comercios, espacios libres y equipamientos en este eje consolida su papel de referenica a escala de barrio. El espacio central privado de la parcela R1-Común se convierte en un espacio lúdico deportivo, un lugar de ocio y esparcimiento en contacto físico con la naturaleza. La ídea de dotar a este barrio de un área verde, genera salud para sus habitantes y es escenario para la practica del deporte y disfrute de la naturaleza. El jardin cuenta con zonas protegidas del viento y la lluvia, con acceso a espacios y zonas de juego de carácter más íntimo. Por otra parte se cumple la condición de espacio urbano exterior accesible, sin barreras arquitectónicas. El urbanismo en las dos décadas anteriores se basaba en la recuperación y recreación de un espacio urbano de siluetas tradicionesles. Actitudes respetuosas, destinadas a traducir una voluntad de control basada fundamentalmente en la prudencia de lo ya ensayado. La realidad es mucho más compleja, hecha de cambios, empeñada en contradecir aquel sueño de orden y armonía. Son cambios que afectan al tiempo en que vivimos, un tiempo que ya no es el de la clonación gradual y repetitiva propio de la ciudad clásica, sino un tiempo arrítmico, hecho de sacudidas, sorpresas y entrelazamientos, abocado a la presencia de lo insólito, de lo artificial. Cambios en los propios medios de vida, debido en gran parte a las nuevas tecnologías y a los medios de telecomunicación que afectan tanto a la vida laboral como doméstica.
Teniendo en cuenta que son viviendas de protección pública, en régimen de alquiler, se ha intentado satisfacer las maximas necesidades posibles, proyectando viviendas de uno, dos, tres y cuatro dormitorios, con un gran abanico de tipologías, con una superficie útil comprendida entre 32 y 90 m2. El total de viviendas de la edificación es de 90 unidades, distribuídas en cuatro portales o bloques. La planta bajo rasante se destinará a garaje, con un total de 98 plazas de aparcamiento. La planta baja cuenta con una parte de locales comerciales, existiendo una zona de paso cubierto. En planta primera de los bloques o portales nº 2 y 3 existe un espacio público, abierto y protegido, de gran dimensión para actos lúdicos, de recreo y juegos.