Una familia suizo-chilena deseaba compartir una vida en comunidad con extranjeros y viajeros. Para conseguirlo, su casa debía transformarse para ofrecer espacio suficiente para reunirse y compartir, así como espacios privados para el descanso y el recogimiento.
La construcción original tenía una sola planta y ya ocupaba la porción máxima de terreno permitida por la normativa local, por lo que la ampliación de la casa sólo debía producirse en vertical. El terreno tenía una geometría triangular, y las restrictivas normas urbanísticas imponían un reto a la calidad del espacio, las aberturas, las ganancias solares, las vistas y la iluminación natural. Todo ello se convirtió en el objetivo del proyecto.


La geometría de la planta buscó el máximo espacio permitido en todo su contorno y sólo se vio interrumpida por las aberturas de la fachada norte destinadas a captar el paso del sol en invierno. Un parasol móvil de madera bloquea el sol en verano y garantiza la intimidad entre vecinos. Los espacios de reunión y descanso dan al norte, y un patio abierto da al sur para garantizar la iluminación y ventilación naturales de todos los recintos. Los espacios de servicio se iluminan y ventilan con luces cenitales practicables. La envolvente arquitectónica es de panel térmico autoportante y el tejado recibe además una capa de piedras y mármoles para frenar el calor en verano.


Team:
Architect: Irene Escobar Doren
Structural Calculation: Gonzalo Araya Rojas
Construction: Freddy Reyes González
Photography: Nicolás Contador Dale


Material Used:
1. EcoWall - SIP Panel– Magnesium Oxide Sulphate Collection
2. Lusso – Red Mosaic - Glass Collection
3. Arauco – Ceilings on Sized Dry Wood - MSD Collection
4. Ducasse – Rails, wheels and trolleys for sliding doors
5. Bastro – PVC windows and thermopanel glass
6. Velux - Practicable overhead lights – Solar tunnels and Ceiling Windows
