Un hogar debe ser un paraíso único de estilo único, tomando esta noción Aum arquitectos diseña esta obra maestra residencial de 2200 pies cuadrados. Desvelando un paraíso de 4 dormitorios enclavado en una pieza arquitectónica semicircular. Preservando arquitectónicamente la santidad de los dormitorios, una decisión de diseño audaz se despliega como la sala de estar converge a la perfección con la cocina cerrada, creando una extensión expansiva y lujosa que establece el tono para toda la residencia.
La fusión perfecta del salón y la cocina está delimitada por un paraíso tropical, un vivaz separador que no sólo introduce un toque de naturaleza, sino que también proporciona una ruptura visual entre los ámbitos culinario y gastronómico. Todo el espacio está envuelto en una estética contemporánea, y cada habitación presenta una armoniosa mezcla de estilos, aunque los elementos modernos de mediados de siglo danzan predominantemente por el tapiz del diseño.
El tema general de la casa aúna lo moderno y lo minimalista, creando un puente estético que abarca todo el espectro de la sofisticación. La materialidad y el tacto cobran protagonismo, ya que todas las superficies y texturas se eligen con meticulosa atención. La experiencia táctil se convierte en parte integrante de la filosofía de diseño, creando una casa que no sólo es visualmente impresionante, sino también un deleite sensorial.
Hogar de una joven pareja y sus dos hijas adolescentes, la residencia es un lienzo que refleja el individualismo. El salón, un lujoso espacio adornado con suaves formas curvilíneas, se convierte en el núcleo de un diseño intencionado. Predominan los tonos neutros, puntuados por estallidos de color y estampados en las zonas de asiento segregadas. Un alegre papel pintado de lunares en la zona del bar y una tela de estampado tropical naranja brillante en las sillas del comedor inyectan una vivaz vitalidad.
La intencionalidad resuena en la alargada habitación de la hija mayor, donde la abundancia de rojo vivo crea un entorno visualmente estimulante. Las sutiles texturas de madera del suelo y los armarios equilibran el atrevimiento, y el cuarto de baño contiguo armoniza con una combinación de rojo y blanco a juego, creando un refugio cohesionado.
La habitación de la hija menor, aunque es la más pequeña, rebosa energía. Azulejos hechos a medida adornan el suelo y las paredes en un tono verde azulado brillante, inyectando una sensación de juego e individualidad. El dormitorio principal destila elegancia con su suelo de terrazo y su planificación minimalista. Suaves formas curvas y elementos de cuero colocados estratégicamente aportan textura y colores tenues.
El dormitorio de los padres, en cambio, apuesta por la sutileza, reconociendo la madurez de sus ocupantes. El diseño refleja un ambiente sereno que garantiza un retiro tranquilo a los propietarios.
En este paraíso suburbano, cada espacio se convierte en un capítulo de la narrativa familiar. La residencia no es una mera vivienda; es una expresión intencionada de individualidad, estilo y armoniosa combinación de estética moderna y minimalista, todo ello enmarcado por el impresionante panorama de la ciudad.