El proyecto se ubica en el corazón de Playa del Carmen, ocupando una cuadra entera entre la mundialmente famosa Quinta Avenida y la Playa del mar Caribe, un sitio con gran importancia turística e histórica para la ciudad.
Mediante este proyecto se plantea potenciar la conexión entre la Quinta Avenida y la playa a través de una serie de plazas escalonadas que liberan la vista hacia el mar y se adaptan al terreno natural creando un programa arquitectónico inclusivo para el máximo aprovechamiento de todos los espacios propuestos, conservando la vegetación existente para generar zonas sombreadas, espacios definidos para los comerciantes y espacios de usos múltiples que le permitan a los habitantes y comerciantes entablar una vida de comunidad al mismo tiempo que se genera una relación con los turistas.
El programa que se distribuye dentro de un terreno anteriormente destinado para el mismo uso, comprendido dentro de las principales calles que conectan la ciudad. Inicia con un sendero continuo que atraviesa todos los espacios recreativos, culturales, de contemplación y de descanso, y remata con la Plaza de las Sirenas enmarcando una vista de la majestuosa costa caribeña y un muelle-mirador con un recorrido lineal a lo largo de la playa que concluye con la Plaza de los Voladores de Papantla.