Casa K es uno de los proyectos del estudio que más tiempo nos ha llevado para su realización. El Proyecto lo comenzamos en 2012 y la casa no se ha podido completar hasta 2021.

A lo largo del proceso, el proyecto y la obra han sufrido numerosos inconvenientes, de menor o mayor dificultad. El Anteproyecto original partía con la premisa de que la vivienda formaría parte de un complejo de mayores dimensiones, el cual iba a ser la residencia multigeneracional de toda una familia. Finalmente, el cliente decidió situar su vivienda en otra parcela, de mayor atractivo. Cuando iniciamos las pertinentes adaptaciones del proyecto, se trataba de un terreno prácticamente virgen, parcialmente ocupado por un bosque, y de terreno con una ligera pendiente en descenso hacia el valle de un río cercano.

En el momento en que finalizaron las obras, los alrededores de la parcela se habían urbanizado ya de manera considerable. De acuerdo con los deseos del cliente, el proyecto debía constar de un edificio desarrollado en una sola planta, con abundante iluminación natural, permitiendo a sus habitantes la sensación de contacto directo con la naturaleza.

El Proyecto de vivienda se ha configurado a partir de tres volúmenes bien diferenciados a nivel funcional. Estos volúmenes se han unido a partir de patios vidriados, permitiendo la entrada de luz y vegetación al interior. En la fachada situada hacia la calle se han previsto los cuartos técnicos, el garaje, y la zona de día: cocina, comedor y salón.

Debido a que para el cliente era de suma importancia mantener la intimidad, la fachada en esta zona de la vivienda prácticamente no está provista de ventanas, a excepción de un hueco estrecho para el gato, situado en la puerta de entrada. Incluso la puerta de entrada al garaje está cubierta por paneles de madera. Totalmente distinto es el tratamiento de la zona interior y dormitorios de la casa, donde las fachadas son vidriadas en su práctica totalidad, abiertas al patio interior y terrazas.

Los pasillos y cuartos técnicos están iluminados de manera adicional a partir de lucernarios. La estética del edificio ha sido diseñada como una combinación compuesta por delicados paños enfoscados en blanco, ventanas de suelo a techo y paneles de madera decorativos.

Desafortunadamente, la obra no ha resultado fácil. El constructor, que resultó ser poco profesional, realizó el trabajo sin dedicación y sin seguir las directrices marcadas por el proyecto. Esta situación propició la paralización total de los trabajos y un largo proceso judicial. Durante ese tiempo, el edificio sufrió daños y se cubrió de vegetación. Cuando parecía que ya no existía solución posible para salvar el edificio, el cliente demostró ser una persona consecuente y con determinación. Finalmente se limpió el edificio hasta dejar solo la estructura existente y fue reconstruido poniendo la máxima atención al detalle y a los materiales de acabados.

La Casa K fue uno de los primeros proyectos de nuestro estudio. Todos los problemas y complicaciones relacionadas con su construcción resultaron ser una experiencia bastante difícil para nosotros. Es por esto por lo que el resultado final alcanzado nos alegra y satisfice de manera especial.