La zona del proyecto está situada en Viale Fulvio Testi 223, en Milán, y es una oportunidad para recuperar y poner en valor la estructura del antiguo Instituto Pirelli, construido en los años 50, tras varias transformaciones.
La estructura, antaño utilizada como escuela-taller y ahora abandonada, se compone de dos partes: una utilizada como aulas y posteriormente transformada en oficinas, y otra que es una fábrica típica formada por una secuencia de naves con una inclinación de unos 8 metros y una longitud que varía entre 15 y 30 metros con una altura media de 7 metros.
La estructura de ladrillo es peculiar, con un tejado en cobertizo con estructura metálica. En los últimos tiempos (década de 1990) el edificio ha sido adaptado como espacio para eventos y formación, con una intervención que borra casi por completo el carácter preexistente del interior. La propuesta lee el potencial del módulo estructural original, que se recupera, actualiza y reforma en una nueva disposición general, alineando el edificio con el de ladrillo y demoliendo una parte del edificio de conexión, enfatizando el patio hacia Viale Fulvio Testi.
L'image de l'édifice est renouvelée tant pour l'isolation thermique nécessaire que pour la dégradation des panneaux existants, avec la mise en place d'une façade qui répond à la partition et aux caractères de l'édifice existante.
De este modo, las mínimas variaciones planimétricas realzan el edificio existente al tiempo que preservan plenamente el parque con sus árboles de gran calidad.
Se consigue una nueva armonía y proporción entre los componentes del edificio, donde el contrapunto entre el cuerpo del edificio, metálico y caracterizado por un sistema ordenado de paneles metálicos que mantienen la misma proporción que los paneles de hormigón existentes y pintados en color rojo ladrillo mate, entra en contrapunto con el edificio de ladrillo, más horizontal, que se conserva íntegramente salvo la modificación de las ventanas y la cubierta por motivos de eficiencia energética.